Pasados los meses más duros del año, es hora de preparar el césped para la llegada del buen tiempo. Volver a disfrutar de un jardín con un verde llamativo y uniforme requiere de una serie de cuidados para obtener los mejores resultados.
Estas son las labores más recomendables para poner a punto el césped de cara a estas fechas.
Escarificado y aireado
En el césped se suele acumular una capa de restos vegetales y tierra en la base de la hierba, que impermeabiliza el suelo y favorece la aparición de hongos y plagas. Para eliminar esta capa y airear el terreno es necesario escarificar, es decir, arañar la superficie de la tierra. Para realizar esta labor se puede hacer de forma manual, usando un rastrillo, o mediante una máquina escarificadora.
Resiembra
Resembrar consiste en sembrar semillas de hierba nuevas, esta labor permite rejuvenecer el aspecto del césped, especialmente en aquellas zonas con calvas.
Para realizar la resiembra es aconsejable esparcir la semilla de la manera más homogénea posible, cubrir con una capa fina de recebo y a continuación pasar un rodillo para que la semilla entre en contacto con la tierra.
Fertilización
La siguiente labor en el cuidado del césped consiste en alimentar nuestro césped utilizando fertilizantes específicos. Una buena fertilización hace que la hierba luzca más verde y aumente su fuerza, vigor y salud,
Lo mejor es emplear abonos específicos para césped de liberación lenta, es decir, que aportan los nutrientes necesarios a lo largo de varias semanas. Otra opción es utilizar mantillo, que además mejora la estructura del suelo.
Siega
Es imprescindible cortar la hierba regularmente ya que el césped crece muy rápido durante la primavera y verano. La altura del césped debe ser aproximadamente entre 2.5 y 4 cm. de alto. Para céspedes con mucho desgaste o en áreas muy sombreadas, la altura debería ser de más de 5 cm.
No es aconsejable segar el césped demasiado corto, ya que es la forma más rápida para que aparezcan las malas hierbas.
Para realizar esta labor, ahorrando tiempo y esfuerzo, lo más recomendable es utilizar una buena máquina cortacésped.
Riego
El riego es otro de los factores decisivos para tener un césped de calidad, ya que la mayoría de las cespitosas son muy exigentes en agua.
Si no hay suficiente agua, el césped no recibe los nutrientes esenciales para su crecimiento, reproducción y, sobre todo, su defensa contra las enfermedades y plagas. Sin embargo, tampoco es recomendable el riego excesivo ya que puede tener el efecto contrario.
Para un uso eficaz del agua, en épocas de calor no se debe regar en las horas centrales del día, para evitar la pérdida de agua por evaporación. Lo mejor es regar temprano por la mañana.
Se han de revisar los aspersores para lograr un riego uniforme. También es aconsejable examinar la calidad del agua.
Tratamientos preventivos
Existen productos específicos y muy completos en el mercado para el tratamiento preventivo contra las malas hierbas y musgo como son los herbicidas líquidos.
¿Nos hemos dejado algún cuidado básico? Desde Urban and Garden te hemos contado las labores básicas para que esta temporada de primavera-verano puedas disfrutar del césped de tu jardín, pero seguro que tienes otras muchas sugerencias o trucos ¡Cuéntanoslas en un comentario!